Mi propósito con esta andadura es expresar mi visión y opinión, extravagantes o no, sobre aspectos de la vida, usando la coctelería como metáfora. Para ello voy a crear mi recetario personal de coctelería.

Mi vida ha estado girando en torno a la coctelería desde hace ya algunos años. Empecé en esto por casualidad y, desde el principio, ha sido un mundo que me ha fascinado. No sólo por el espectáculo que conlleva su elaboración, sino también
porque es una vía a través de la cual se pueden expresar (y provocar) sensaciones y emociones, usando de una manera muy sutil los distintos sabores, olores, colores y formas.

En la coctelería, así como en la vida misma, hay que mezclar los ingredientes adecuados en su justa medida, para así obtener diferentes matices de cada momento. Y, en el saber mezclar los ingredientes, está el secreto del buen vivir.


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jueves, 23 de febrero de 2012

Truffle Sazerac, el sabor del pecado... by Volker Seibert.

El juego entre tú y yo, nuestro pasatiempo favorito, es jugar con juego. Vivimos sometidos a esos momentos en los que la adrenalina fluye por nuestras entrañas a velocidad de vértigo, sin importarnos el riesgo a abrasarnos.
Tú eres material altamente peligroso, yo materia extremadamente sensible. ¿ El resultado?
Una combinación explosiva que nos conducirá al desastre.
De igual modo, nos adentramos inexorablemente por este pedregoso a la par que tentador camino. Sabemos que hay un punto del camino que es un lugar de no retorno.
Tenemos objetivos diferentes, tú mi cuerpo, yo tu alma... Pero sabemos que el resultado será justo el contrario, tú mi alma, yo tu cuerpo.
Siendo consciente de todos estos riesgos, ¿ quieres seguir adelante con el juego ?
Pues ahí están las reglas:

TRUFFLE SAZERAC
Lugar, Capri Lounge en Colonia, donde hasta el más mínimo detalle ha sido cuidado. Desde el ambiente; el cual te transportará a la época de oro de la cultura coctelera; pasando por la minuciosa creación y elaboración del cóctel, y por supuesto el impecable trato de Volker Seibert y su equipo, quien te deleitará con este Truffle Sazerac, un juego en el que querrás participar.
Un lugar donde los sabores sensuales, bebidas con un irresistible estilo retro que te transportarán a la etapa de la prohibición. ¡ Y como nos gusta lo prohibido! Experimenta la pasión, la armonía; y descubre a que sabe el divertido juego de pecar.
Regla nº1. Remy Martin XO Cognac.
Un cognac que ofrece un amplio abanico de sensaciones y aromas gracias al potencial de las uvas.
Un balance perfecto que le da una textura suave. Gran intensidad y fuerza.
Elegancia floral, aromas a jazmín y violeta con notas a tabaco y cuero.
Armonía, opulencia y fuerza. Diversión y adrenalina sin límite es lo que promete este juego.
Regla nº2. Oporto 20 años.
Oporto significa “ Río de Oro”. Se trata de un vino fortificado, se le añade brandy para interrumpir el proceso de fermentación, aumentando la concentración de alcohol y la de azúcares.
Hay varios tipos de oportos, pero el que vamos a hace hincapié en el que nos concierne para esta ocasión, el vintage. Es el rey de los oportos por excelencia, la máxima calidad.
Sólo se elaboran en añadas declaradas excepcionales por el Instituto de Vinho do Porto.
Se seleccionan las mejores viñas de las mejores parcelas. Y en algunas bodegas aun se realiza el pisado con los pies.
Es uno de los vinos más longevos que se conocen, no alcanza su pleno desarrollo hasta pasados 20 años.
Se crían durante dos años en barrica, y su bouquet característico lo alcanza tras años y años de crianza en botella.
En su juventud son muy concentrados y frutales, algo cerrados en nariz, y ásperos y potentes en boca.
Es con el paso del tiempo que comienzan a abrirse y desarrollan su bouquet especiado, a cassis o bayas maduras.
Los oportos pueden ser dulces, muy dulces, semi secos o extra secos.
La dulzura dependerá de las condiciones del momento de interrupción de la fermentación.
Piensa bien las consecuencias y los riesgos de este juego, pues una vez llegados al punto de no retorno, nada podrá interrumpirnos. Siendo conscientes de que es una bomba de relojería lo que tenemos entre nuestras manos... Si me sigues leyendo es que has decidido seguir así que, a partir de aquí no hay retorno.
Regla nº3.  Aceite de trufa blanca.
La trufa blanca es la más cara que existe, ya que no se ha conseguido cultivar de forma artificial, es muy difícil encontrar grandes cantidades.  Crecen a 40 cm bajo tierra en los bosques de Piamonte italiano.
Fue comida de faraones, prohibido por la iglesia y poseedor de un alto poder afrodisíaco. Es un producto de superlujo.
Tiene un aroma y sabor muy característicos. Incluso en pequeñas cantidades, será el sabor predominante.
Sé consciente del alto precio que hay que pagar por este juego, y la apuesta es a todo o nada.
Es un sabor curioso el del pecado, o lo odias o lo adoras. Es un olor denso, que se te mete por la nariz como queriendo quedarse para siempre grabado en tu mente.
Regla nº4. Sirope de azúcar.
La parte atractiva y tentadora, la que se te insinuará de modo que no puedas resistirte a sus encantos. Que quieras jugar hasta la perdición.
Regla nº5. Absenta.
La absenta es de origen suizo, aunque adquirió fama en Francia, por ser la bebida predilecta de los artistas malditos del s. XIX. A las cinco p.m. se puso de moda en muchos cafés y cabarets durante la década de 1860 tomar esta bebida enloquecedora, la hora verde. La hora de jugar.
A ella se le ha atribuido propiedades alucinógenas, e incluso de llegar a provocar la locura. De lo que no hay duda es que la Artemisia Absinthium tiene efectos y consecuencias, se podría decir que ponzoñosas.
Debido a las consecuencias alucinógenas de esta bebida fue prohibida durante mucho tiempo, pero gracias a su reclamo, se han ido levantando dichas prohibiciones, eso sí fijando unos límites de graduación alcohólica y la concentración de tuyonas, que es a lo que se le apropia las propiedades alucinóngenas de la absenta.
Sólo un pequeño toque, un soplo de magia que te haga perder la cabeza, que nos impulse a jugar, moviendo fichas como si de un baile insidioso se tratase. Un baile que tu cabeza rehusa seguir, pero tu instinto de arroja a él.
Regla nº 6. Peychaud’s Bitter.
Creado por el doctor Antoine Amedie Peychaud, quien , basándose en una receta familiar quiso crear un remedio curativo; lo que acabó convirtiéndose en uno de los elementos más icónicos de la coctelería.
Es algo más floral que la Angostura Bitters, y tiene unas ligeras notas picantes y anís.
Con sólo unas gotas, el cóctel se tornará, ampliando su abanico de aromas y facetas que a simple vista no se aprecian.
El sabor de la cruda realidad, el retrogusto amargo que deja jugar con fuego.
Por eso la mejor forma de tomarlo es combinándolo para acentuar y complementar sabores, aparte de darle un caracter más fuerte a la bebida.
Se perfuma vaso y hielo con la absenta, se añaden los ingredientes al vaso mezclador y se mezclan. Finalmente se decora con el aroma de los aceites que desprende la corteza de limón, y la corteza propiamente dicha.
Una bebida intensa, idónea para emociones fuertes. Ingredientes que tienden a ser todos  predominantes, pero mezclados de tal modo que el equilibrio reina en el cóctel de modo que se combinan y complementan entre sí.
Un trago delicioso para relajarse, disfrutarlo y dejarse llevar por el momento.
En el caso de este Truffle Sazerac, entro en el juego sin dudarlo un instante... En la vida real, déjate llevar, disfruta del momento, pero cuando juegues con fuego piensa bien si te quieres quemar, pues hay situaciones y decisiones cuyas consecuencias son irrevocables. Y es en estos casos en los que deberías sopesar qué merece más la pena, ¿ lo que ganas o lo que pierdes?
¿ Hacia dónde se inclina tu balanza?