Me miro, observo mis manos, mi cara. Y lo único que observo es el color pálido de mi piel.
¡ Qué extraño! ¿ Cómo una piel tan inexpresiva puede contener tanto color, vida y sensaciones a la vez? Por mis venas corre el
rojo, pero además en
mi habitan el verde esperanza, el rosa inocencia, el azul paz, el amarillo ácido, el negro... ¡ Ay, esos días negros!
Bajo esta capa vulgar que me
recubre, a modo de escudo, laten todos los colores del arco iris. Soy un caleidoscopio de sensaciones y emociones, que giran sin cesar, dando formas y colores, que son los que conforman mi esencia. La cual, se convulsiona sin descanso dentro de mí, ya que ansía salir al exterior, con desespero atroz. De los que me rodean, son muy pocos los que logran captar mi esencia, pues la gran mayoría, no llegan a ver más allá del color de mi piel.
Y de colores y esencias va esta historia. Cómo algo de apariencia corriente e i
nsignificante, puede guardar en su interior semejante cúmulo de sensaciones y vida, que giran y giran sin cesar dando forma a mi alma.
Como los productos de Finest Call , de apariencia insulsa y artificial, pero en realidad son un producto de alta calidad, y se están introduciendo en el mercado a una velocidad de vértigo. A pesar de que a simple vista dan la impresión de ser el típico producto sintético que lo único que hará
es, aportar química y restar sabor y calidad a los tus cócteles.
Esto me recuerda a mi coche... Sí, mi coche, ya veréis por qué.
Este es mi coche...
Vehículo corriente donde los haya. Ni un artículo de ornamentación, salvo los diversos roces que delatan mi dificultad para adaptarme a sus medidas y, dejar constancia mis problemas con las columnas de los parkings.
Pero no os dejéis engañar por esta apariencia, pues su interior es este...
Una vez te sientas en él, ¡ cómo cambia mi coche! Tiene corazón y alma de porsche. La esencia que transmite, es lo que me seduce de él. Me he atrevido a mirar más allá de su apariencia, y sé a ciencia cierta que he escogido bien.
Mi proposición en esta ocasión, es la siguiente. Haced girar vuestros caleidoscopios, mostrad vuestros colores y formas; vuestro verdadero yo, en definitiva. Y
no lo perdáis por miedo a quedaros solos. Vuestro exterior es una coraza qu
e dejará importar, y habrá alguien que sabrá ver vuestro interior.
No prejuzguéis, ni infravaloréis a los que están a nuestro alrededor, por muy sosa que sea su apariencia. Dadles una oportunidad de demostrar su esencia, colores y sabores. Y os aseguro que en muchas ocasiones os llevaréis una, muy grata sorpresa.
Los productos Finest Call, y gracias al duro trabajo de Radical Bartending School, distribuidores oficiales de esta marca en España, http://www.facebook.com/profile.php?id=100002036580154 están consiguiendo afianzarse en el mercado español, y para empezar, Finest Call colaborará con la ABE en 16 competiciones por todo el país.
Y sabed que por muy duro que sea el camino, da igual que seas melocotón, fresa o frambuesa. Lo importante es que seas tú, 100% natural. Y que se acerquen solo los que
aprecien vuestro sabor de verdad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario